Creado en la década de 1920, presumiblemente en Londres o París, el Sidecar es un cóctel hecho a base de Coñac o Brandy, Cointreau, y zumo de limón; y como en muchos de los cócteles clásicos tiene una fórmula sencilla que sin embargo produce un resultado complejo y lleno de matices. La clave esta en equilibrar los tres ingredientes, tanto en proporciones, como en calidad.
Es, en cierta forma, uno de los cócteles ideales para hacer la transición del verano al invierno, ya que gracias al Coñac y el Cointreau tiene la pegada y complejidad de un Manhattan, y la incorporación del zumo de limón le da la ligereza de un Margarita, lo mejor de dos mundos.
Receta del Sidecar
Dos consideraciones con este cóctel: primero, la calidad de los ingredientes importa, no hace falta utilizar un Coñac o Brandy que sean tope de gama, pero si conviene tener como base un buen coñac, uno tipo V.S. (Very Special) ya está bien. En el lado del licor de naranja, el Cointreau es casi irremplazable, si bien hay otros triple sec que tienen buena calidad, el Cointreau tiene un equilibrio entre seco y dulce ideal para este coctel.
Segundo, siéntete con libertad para variar las proporciones, la receta que te proponemos está basada en la version clasica que aparece en el mitico «Savoy Cocktail Book» y resulta un tanto inclinada hacia el lado seco, así que puedes añadir un poco de sirope de azúcar si prefieres un Sidecar mas dulce. Tambien puedes probar a disminuir la cantidad de Coñac hasta unos 45ml, dandole asi mas protagonismo a los citricos de la receta.
La manera tradicional de servir el sidecar es en una copa de cóctel con el borde ribeteado de azúcar, a nosotros nos gusta ribetear sólo la mitad de la copa, para que quien beba el cóctel decida por sí mismo si quiere el azúcar del borde o no.
Ingredientes
60 ml Coñac
30 ml Cointreau
22 ml zumo de limón
15 ml jarabe de azúcar (2:1) opcional
Procedimiento
Para ribetear la copa de azúcar frota una rodaja de limón sobre el borde de la misma, dale la vuelta para que no entre azúcar en el interior, y procede a espolvorearla por el exterior, lo ideal es que no sean más de 4 o 5 mm de azúcar. Este paso lo puedes hacer con anticipación y esperar a que el azúcar se afiance en la copa, evitando así que al servir el cóctel escurra, haciendo que termines con los dedos pegajosos.
Pon todos los ingredientes en la cóctelera, añade hielo y agita por unos 15 segundos
Filtra el contenido de la cóctelera a través de un colador fino, vertiéndolo directamente en una copa de cóctel.
Puedes decorar con cáscara de naranja o simplemente dejar como única guarnición el ribeteado de la copa.
