El Martini en su forma original y más auténtica es una mezcla de Gin y Vermouth, con la posible adición de algún chorrito de Bitter, servido en una copa de cóctel y decorado con una aceituna o una cáscara de limón.
Como muchos de los cócteles clásicos su verdadero origen es desconocido, las primeras recetas de las que se tiene constancia son de principios del siglo XX, y se presume que es una evolución del Martínez, que a su vez evolucionó a partir del Manhattan.
En un comienzo el vermouth utilizado era el vermuth rojo dulce, que era el único disponible en la época y el gin era del tipo Old Tom, también más dulce; luego con la aparición del vermout seco (dry vermouth) y el London Dry Gin, el cóctel se rebautizo como Dry Martini para distinguirlo del Martini original.
El Dry Martini es uno de los cócteles más sencillos de preparar, sin embargo debido a la gran cantidad de variaciones que admite, tanto en las proporciones de los ingredientes como en las distintas técnicas de preparación o en la variedad de decoraciones, es quizá uno de los cócteles más complejos que existen.
Receta del Dry Martini Nº 1
Como receta para el Dry Martini hemos escogido la de David Embury de su libro de 1948 “The fine art of mixing drinks” donde señala “Después de una extensa experimentación he llegado a una proporción de 5:1 como la proporción más placentera para el paladar medio”, aunque en lo personal a Embury le satisfacía mas una proporción de 7:1, a nosotros esta versión con unas proporciones mas equilibradas nos parece un excelente punto de partida, a partir de aquí puedes hacer tus propias variaciones que mejor satisfagan a tu paladar.
El gin que hemos utilizado es Vanagandr, una ginebra tipo London Dry hecha artesanalmente en Cambre (A Coruña), siguiendo el método tradicional, y en un alambique fabricado a mano, con el que consiguen una destilación pausada y sin prisas, de la que emergen sólo 440 botellas de un gin de la mejor calidad.
Es un gin muy aromático donde se siente en nariz el enebro acompañado de notas florales y cítricas, en boca añade unas interesantes notas de regaliz y especias, y deja un recuerdo nítido y prolongado en el paladar, muy recomendable.
En este cóctel la temperatura final es clave, todos los ingredientes deben estar fríos; así que como siempre el vermouth en la nevera, y tanto la copa que vas a utilizar como al vaso mezclador colócalos en el congelador, al menos una media hora antes de comenzar a preparar tu Martini.
Ingredientes
2½ Oz / 75ml Gin Vanagandr (London Dry)
½ Oz / 15ml Dry Vermouth
2 chorritos de Angostura Orange Bitters
1 aceituna verde como guarnición
Procedimiento
Utilizando un jigger añade al vaso mezclador las cantidades exactas de Gin y Vermouth.
Añade dos chorritos de Angostura Orange Bitters.
Añade hielo al vaso mezclador hasta ¾ de su capacidad, es importante que haya bastante hielo.
Con ayuda de una cuchara para cóctel, remueve el contenido por unos 30 segundos; notarás que en el exterior del vaso de mezclado se empieza a generar condensación.
Saca tu copa del congelador y tenla a mano.
Utilizando un julep strainer cuela el contenido del vaso mezclador a tu copa.
Decora con una sola aceituna en un cocktail pin o en un palillo y disfrutalo al momento.
el limón es fundamental, no solo guarnición. Su aroma lo cambia todo.
Mucha razón Juan, cuando los ingredientes son pocos, y el equilibrio de aromas es clave cualquier detalle marca una gran diferencia, y en el caso del Martini es asi, pocos ingredientes y un juego magistral de clavar el equilibrio entre ellos, donde el limón juega un papel clave
Saludos
os ha faltado exprimir una corteza de limón una vez servido en la copa.
Hola Papagayo, es que no queríamos levantar ronchas, ya que hay dos escuelas de “guarnición” del Dry Martini, nos quisimos apegar a la tradición con nuestra versión, pero es cierto que en vez de una aceituna bien le vale una piel de limón, con la que previamente hayas expresado los aceites esenciales. Muy buen aporte
saludos